Tras asumir oficialmente el cargo el pasado viernes 31 de octubre, monseñor Engelberto Polino Sánchez presidió este domingo su primera misa como obispo de Tepic, en la Catedral de la capital nayarita, ante cientos de fieles que lo recibieron con calidez, aplausos y oraciones.
Durante su homilía, el nuevo Obispo dirigió un mensaje centrado en la esperanza y el valor de la vida, exhortando a los creyentes a reafirmar su fe en Cristo, “quien ha vencido la muerte para siempre”. Invitó también a dejar atrás las creencias que exaltan la muerte o la oscuridad, recordando que la fe cristiana celebra la vida y la redención.
Con una metáfora deportiva, comparó la existencia con un partido de fútbol: el presente —dijo— es el tiempo para vivir con fe y rectitud; la muerte, el descanso; y la resurrección, el “segundo tiempo” para quienes han jugado con amor y esperanza.
Al concluir la ceremonia, monseñor Polino Sánchez descendió a las criptas donde reposan sus antecesores, en un gesto de respeto y continuidad con la historia de la Diócesis.
Con este acto, inició formalmente su ministerio pastoral dominical al frente de la Iglesia en Tepic, reafirmando su compromiso de fortalecer la fe, promover la unidad y acompañar a las familias nayaritas.
