De acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y de la Procuraduría Federal del Consumidor, en México son 14 las entidades reconocidas oficialmente como productoras de café, entre ellas Nayarit, que aporta alrededor de 2.5% del volumen nacional y se ubica entre los primeros diez estados cafetaleros del país.
El territorio nayarita se extiende entre las latitudes 20°36’ y 23°05’ norte, lo que coloca a sus cafetales en el límite superior de la franja tradicional de cultivo de café en el planeta, cercana al Trópico de Cáncer.
Investigaciones recientes de la Universidad Autónoma de Nayarit señalan que cerca de 30% del territorio estatal reúne condiciones ambientales óptimas para el café arábica, con especial concentración en los municipios de Tepic, Xalisco, la zona oriental de Compostela y el suroeste de San Blas. En estas zonas, los cafetales se ubican generalmente entre 800 y 1,200 metros sobre el nivel del mar, en laderas de la Sierra Madre Occidental y suelos de origen volcánico, lo que favorece un grano de alta densidad, maduración más lenta y perfiles de taza con buena acidez, dulzor marcado y notas limpias, características que destacan tanto organismos estatales de promoción turística como productores especializados.
El reconocimiento a la especificidad de este origen ha llevado al Gobierno de México a tramitar la Denominación de Origen “Café Nayarit” ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, con el argumento de que la combinación de altitud, clima templado-húmedo y suelos volcánicos genera atributos diferenciados frente a otras regiones cafetaleras del país. Estudios basados en cifras del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) confirman además que municipios como Compostela, Xalisco, San Blas, Santa María del Oro y Ruiz concentran la mayor parte de la producción estatal, lo que ha permitido articular cadenas productivas locales alrededor del café de altura.
En el plano internacional, sí existen fincas experimentales más al norte, particularmente en el sur de California, donde proyectos privados han logrado cultivar café en latitudes cercanas a los 34 grados norte. Sin embargo, los propios organismos especializados describen a Estados Unidos como un país que solo produce volúmenes pequeños de café en Hawaii, Puerto Rico y California, sin que estas nuevas plantaciones figuren como región cafetalera consolidada en las estadísticas agrícolas. Por ello, cuando se habla de Nayarit como uno de los orígenes cafetaleros más al norte del mundo, la referencia se hace a territorios reconocidos oficialmente como productores, con superficie registrada, volúmenes comerciales estables y procesos en marcha para proteger legalmente el nombre de su café.






