La influencer mexicana Valeria Márquez, de 23 años, y la joven colombiana María José Estupiñán, de 22 años, fueron ultimadas por hombres que se hicieron pasar por repartidores, utilizando el pretexto de entregar un regalo para acercarse a ellas.
Ambas mujeres fueron víctimas del mismo modus operandi, eran jóvenes emprendedoras con presencia en redes sociales.
Valeria Márquez fue atacada por un repartidor en su estética en Zapopan, Jalisco, mientras realizaba transmisión en vivo y fue despedida con misa de cuerpo presente en templo de Guadalajara, Jalisco. El nuevo ataque fue a María José Estupiñán, ella recibió una caja de chocolates como regalo en la puerta de su casa en Cúcuta, Colombia, antes de ser baleada en seis ocasiones.
El perfil de los agresores y el método empleado han generado preocupación entre autoridades y colectivos feministas, quienes exigen una investigación profunda para determinar si estos crímenes responden a una tendencia delictiva dirigida contra mujeres con exposición mediática.
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En el caso de María José, se ha revelado que días antes de su asesinato había interpuesto una denuncia contra su expareja por violencia intrafamiliar, lo que ha abierto nuevas líneas de investigación en Colombia. En México, la Fiscalía de Jalisco continúa indagando el asesinato de Valeria Márquez, buscando esclarecer si el ataque estuvo motivado por razones personales.
