El parque funeral, Jardines de San Juan, preparó una serie de actividades para conmemorar y celebrar a las madres. La conmemoración, por el 10 de mayo, se llevó a cabo en un ambiente cargado de amor, nostalgia y esperanza.
Desde las 8 de la mañana abrieron sus puertas para recibir a decenas de familias que acudieron a rendir homenaje a las madres que ya no están físicamente, pero que viven para siempre en el recuerdo de sus seres queridos.
Entre las actividades que se realizaron están dos misas conmemorativas, una al mediodía y otra a las 5 de la tarde, ambas amenizadas con mariachi. Durante la ceremonia se proyectó un video que trajo a la memoria los rostros y nombres de tantas mujeres que dejaron huella en sus familias.
Adelaida Ibarra acudió a visitar a su mamá, quien hace algunos meses perdió la vida, en su memoria persisten los momentos que compartió con ella, “el amor con que cocinaba para que comiéramos, como se preocupaba cuando nos enfermamos, nos expresaba a su manera su preocupación. Hasta el último momento con nosotros, estuvo presente; por eso la mejor manera de honrarla es vivir con valores, con sus enseñanzas”.
La familia de César López, perdió a su mamá hace casi dos años, pero el dolor sigue presente, “es un duelo que hasta la fecha me ha costado mucho, no se puede superar, es algo, pues muy fuerte la verdad. Estamos de la manera que a ella le gustaba, ver a todos sus hijos, a todos sus nietos, toda su familia unida. Era algo que nos inculcaba que en lo bueno y lo malo estuviéramos juntos”. César honró su memoria elaborando los arreglos florales que adornaron su tumba, manualidades que aprendió de ella.
El momento más esperado por los asistentes cada año, la conmovedora actividad “Un mensaje de corazón, al cielo”, donde las y los familiares leyeron en voz alta sus cartas dedicadas a sus madres frente al Templo Resurrección. Los mensajes, escritos en papelitos entregados por asesores del parque, fueron colocados cuidadosamente en un gran corazón de madera, símbolo del amor que trasciende el tiempo.
Con música, oración y mensajes llenos de cariño, Jardines de San Juan convirtió este Día de las Madres en una jornada de memoria viva, donde cada rosa, cada melodía y cada palabra escrita fueron una forma de decir: mamá, siempre estarás en mi corazón.
