En 2020, el 2.6% de las mujeres de 12 a 17 años en Nayarit tenían al menos un hijo, lo que correspondía a 1,700 adolescentes. Esto colocó al estado como la undécima entidad con el mayor porcentaje de madres adolescentes. Sin embargo, para 2023, Nayarit ascendió al tercer lugar nacional en embarazos en niñas de entre 11 y 17 años, revelando un preocupante incremento.
Una de las causas principales de estas cifras alarmantes es la falta de educación sexual adecuada, tanto en las escuelas como en el entorno familiar.
Educación sexual deficiente: voces de los jóvenes
Estudiantes entrevistados compartieron sus experiencias sobre la limitada instrucción en temas de sexualidad. Alexa, una joven encuestada, señaló: “Yo no recuerdo haber recibido educación sexual en primaria o secundaria; fue hasta la preparatoria, y aun así, el contenido era inmaduro porque mis compañeros se reían”.
Aranza, por su parte, cuestionó la capacitación de los docentes: “Algunos no están preparados y lo toman a broma”, mientras que Emmanuel mencionó que las clases se limitan a mostrar “las partes íntimas del hombre y la mujer”, sin abordar a profundidad métodos anticonceptivos o enfermedades de transmisión sexual.
Reducción en la tasa de fecundidad, pero los desafíos persisten
Datos de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2023 muestran un descenso del 30% en la tasa de fecundidad en adolescentes de 15 a 19 años en comparación con 2017, gracias a la implementación de la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes. No obstante, los casos en menores de 15 años continúan preocupando a las autoridades.
Necesidad de educación desde edades tempranas
Los jóvenes consultados consideran que la educación sexual debe comenzar desde edades tempranas, adaptada a cada etapa. “Desde no muy pequeños, pero sí desde chicos, empezar a hablar sobre sexualidad”, expresó Isaura, mientras que Giselle mencionó que en la primaria apenas se tocó el tema de forma muy breve.
Meta para 2030: reducir la tasa de embarazos adolescentes
La Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes tiene como objetivo reducir a la mitad la tasa de fecundidad entre las adolescentes de 15 a 19 años para 2030 y erradicar completamente el embarazo en niñas menores de 15 años. Sin embargo, para lograr esta meta, es fundamental garantizar que la educación sexual sea adecuada y accesible para todos los jóvenes del país.
